Pensé que te conocía, pero el amor lo ciega todo.
Como las tinieblas en la noche,
cubren a la luna en un cielo estrellado.
O como el mar, no deja de moverse
rodeando al mundo, con su belleza infinita.
que todos los planetas y las constelaciones
se mueven a tu gusto.
No habiendo logrado nada en la vida, bueno eso sí,
¡Ser, un ser de mentira!
Y mi corazón recibió una mañana,
el frío filo de tus puñaladas traperas...
La de la cobardía, a muy corta distancia,
atravesaban mi corazón...
Con besos y sonrisas diciéndome que me amabas.
con un burda y falsa coartada
Esta vez siendo tú mismo, el hombre interior.
Esta vez siendo tú mismo, el hombre interior.
lleno de mentiras, eras tú mismo en tu esencia.
En tus ojos enrojecidos de ira, como un toro de miura,
entrante a la plaza.
Nunca confiaste en mí, los años pasaron
Tus palabras lastimosas, de saetas sufrientes
y nocturnas al paso del trono.
¡Y yo sangrando por la primera puñalada!
Tú apatía de quejarte siempre, del mismo camino del rocio...
¡Me castigabas psicológicamente!
y construimos una torre de oro, no la de Sevilla
de sueños y planes...
Pero no sirvieron de nada, si en solo una traición,
En un instante de pasión y morbo, todo lo destruiste.
¡Y te perdone, recuerda amor!
¡Y te perdone, recuerda amor!
Te perdone, recuerda, te perdone, como a un toro de lidia.
Arrastrándote suplicaste perdón, repitiendo tus patrones de tu infancia. ¡Y yo te creí!
Arrastrándote suplicaste perdón, repitiendo tus patrones de tu infancia. ¡Y yo te creí!
Ilusa de mí, amor enajenado.
¡Toda tu naturaleza humana, no valoro lo nuestro!
Y ahora pierdes mí, la luz que te alumbraba,
el amor que te guiaba.
con su calentura.
Y tú por un puñao de parné, te vendiste como un puta,
Y tú por un puñao de parné, te vendiste como un puta,
lo vendiste todo.
¡Cuánta codicia en ti! y mira ¡Mis respeto a las putas!...
Con ese roneo más caliente, ella te envolvió,
El embrujo de su maldad te volverá a traicionar,
Con ese roneo más caliente, ella te envolvió,
el que ahora te gusta, a la vista del gentío.
¡Total eres libre de amar!
El embrujo de su maldad te volverá a traicionar,
el parné lo es todo para ella.
Y tú sabiéndolo, que para ti, tu ruina emocional.
¡Estoy liberada de ti!
La palabra final, es decepción...
Y ahora, me espera la hermosa primavera.
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