miércoles, 6 de mayo de 2020

DESPLAZADOS

Hoy tengo ganas de llorar, 
por la impotencia de ver cómo los pueblos 
no puedan luchar contra sus líderes.

Luchar desde el razonamiento, 
desde los valores de la verdad, 
de la ética y la moral.

Cuanta tristeza es ver cómo el mundo
está gobernada por jugadores, 
corruptos e inmorales.

Por los poderes económicos,
manipuladores de pobrezas. 
Por los señores de las guerras, 
y de las pandemias

Triste es ver a los peones,
manipulados a través del tiempo,
yacen tumbados al sol.

De Norte a Sur, de Este a Oeste. 
Las lluvias les hacen invisibles
a los ojos de todos...

No hay nada para ellos...
Ya no cierran los ojos, no hay noches, 
ni recuerdos, ni mañanas, ni esperanzas.

Sus pieles se marchitan, 
se resquebrajan sus huesos.
El viento rompe el cielo.

Sus dioses se han olvidado
de esta humanidad. 
¿Cómo cerrar los ojos a esta realidad?

Si mueren las almas, en noches de plagas.
Derraman su sangre envenenada, en manos 
de soldaditos de juguetes.

Y como simples espectadores, 
nuestro llanto es solo por el Yo, 
de mí mismo.

Damos algo de dinero, para cauterizar 
nuestras conciencias. 
Por el desaliento, frente a la pobreza

No quiero morir en silencio,
quiero denunciar...

Derechos Reservados- Propiedad intelectual del autor.
Foto de la red
 

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